Luis Portillo construye un islote vegetal en pleno París

El proyecto está concebido como un islote partido por una falla que discurre de noreste a sudoeste. En función del día, los rayos solares penetrarán en el corazón de la nueva manzana mediante reflejos en las superficies irregulares de las paredes. Esta misma irregularidad de los pretiles es la responsable de las sombras y los reflejos cambiantes a lo largo del día.
Además de la impresión de la hendidura central, el complejo tendrá la vegetación como su característica más reconocible. El corazón del edificio contará con un estanque rodeado de un jardíin, sobre el que colgarán macizos de arbustos densos, plantados en las terrazas de varios pisos más arriba. El jardín incluso llegará a la azotea, que se presentará como una mancha verde desde alturas cercanas, como la biblioteca François Mitterarnd.
En el exterior, el edificio lucirá un revestimiento de bambú, que reforzará aun más la sensación orgánica de todo el conjunto. Esta piel vegetal cubrirá una fachada construida con hormigón bruto negro para realzar más el bambú.
El proyecto fue presentado al concurso convocado por la Sociedad de Economía Mixta de París Rive Gauche, por las empresas Nexity y SFL. Esta última es la filial francesa de Colonial, que tras la fusión con la Inmobiliaria Inmocaral de Luis Portillo y Riofisa se convertirá en uno de los líderes inmobiliarios europeos. La promotora invertirá 300 millones de euros en la construcción de T8, que estará finalizado en 2011. El proyecto supone la construcción de 833 viviendas, 110.000 metros cuadrados de oficinas y 21.000 metros cuadrados más para actividades comerciales.
El complejo diseñado por Ricciotti forma parte del plan para rehabilitar el barrio de Rive Gauche. En los últimos quince años, este plan ha permitido la construcción de la Biblioteca Nacional, que se levanta frente a la parcela que se adjudicaron Colonial y Nexity. En concreto, los terrenos donde se levantará T8 (una esquina delimitada por la avenida de France y la rue Neuve Tolbiac) proceden del soterramiento de las vías férreas que va a la estación de Austerlitz. La desaparición del ferrocarril cerrará una brecha urbanística que impedía la conexión de Rive Gauche con el distrito XIII.